Son demonios de complexión grande y huesuda, y negruzca piel, que se alterna con piel blancuzca moteada también de negro. Terribles e inmisericordes organismos. Dos hileras de dientes y ácido por sangre les hacen depredadores de lo más alto de la cadena alimenticia. Fueron liberados por los tozudos enanos mineros de Moria. Un desbarajuste severo para el pueblo de Durín.
Nótese que esta descripción es general, pero también puede ser modificada por el resultado de la partida jugada. El master de turno debe obviar lo segundo.