Un corsario y excelente arquero. Estaba tuerto del ojo derecho. Viajó con los futuros Vizcondes de Lámenir en la empresa que acabó liberando a Qüxu-Qüom, el señor de las serpientes. Muy majo y excepcional arquero.
Nótese que esta descripción es general, pero también puede ser modificada por el resultado de la partida jugada. El master de turno debe obviar lo segundo.